SANTA MARÍA LA MAYOR

Capillas laterales

En la iglesia de Santa María La Mayor de Trujillo existen varias capillas, la mayoría de ellas asociadas a familias linajudas de la localidad.

La capilla del Cristo del conde de Miranda, reformada en 1763 por el conde para alojar una imagen de Cristo de su propiedad. El altar de santa Catalina es similar al del conde de Miranda.

La capilla de don Gonzalo de Torres Carvajal, presenta la heráldica propia de la familia y actualmente contiene una crucifixión de finales del siglo XV atribuida al maestro de Palanquinas.

La capilla de don Pedro Calderón Altamirano presenta inscripción y motivos heráldicos, contiene una tabla dedicada a la Sagrada Familia, de finales del siglo XVI con influencia del pintor Morales.

La capilla de los Loaisa consta de varias sepulturas, siendo la principal el arcosolio del fondo, el conjunto queda cobijado por un importante baldaquino.

La capilla de los Barrantes Hinojosa, originalmente fue el absidiolo de la nave sur y situado independiente de la capilla mayor, a finales del siglo XV se derribó la pared entre ambas estancias dejando un gran arco.

La capilla de los Altamirano, de estilo renacentista, es de finales del siglo XVI y cuenta con arquitectura clásica y escudo nobiliario compuesto por yelmo de penacho y lambrequines. Esta capilla es estructuralmente similar a la capilla de los Cervantes Gaete, también de estilo renacentista de finales del siglo XVI.

La capilla de don Juan Pizarro y de doña Juana de Hinojosa, originalmente fue absidiolo de la nave norte quedando unido a la capilla mayor a finales del siglo XV a través de un gran arco, tiene un retablo con San Juan Bautista y San Juan Evangelista, la Crucifixión y una imagen de la Virgen.

La capilla de Pedro de Orellana Bejarano es de estilo gótico tardío y contiene un retablo renacentista que representa a San Antonio Abad.

La capilla de los Vargas es la capilla funeraria más importante del templo, tiene bóveda de crucería con combados y terceletes con escudos de los Vargas y cuatro arcosolios tardogóticos, fue construida por el caballero Juan de Vargas acabándose en 1522.

Por último, la capilla del baptisterio, situada a los pies de la nave norte, fue edificada como primera parte del conjunto de obras de la Torre Nueva siendo su base; presenta el escudo de su constructor, el obispo don Gutierre de Vargas Carvajal; en el interior está la pila bautismal de estilo renacentista.